El Vecino

todos los días en la mañana Elena ve su calle por la ventana es tan quieta tranquila y ve a sus vecinos limpiar la banqueta o simplemente parados platicando, su vecina de enfrente tiene un hijo como de 25 años, desde que el llego a la calle de Elena siempre le ha dicho cosas como "hola vecina que linda amaneció hoy" pero ella solo se digna a hacerle un desplante y seguir su camino. Eso sucede cada vez que el la ve salir de la casa, Elena es una mujer de mucho carácter por lo cual no permite que nadie le hable sin previo consentimiento, es una mujer con una mirada fuerte y retadora pero cuando ella se lo propone es linda y seductora pero ese lado de Elena nadie lo conoce al menos eso se pensaba de ella, hoy no fue la excepción Elena se arreglo antes de salir de casa y se percato que su vecino estaba en la calle jugando con un niño, ella salio a la tienda sin siquiera poner atención a su alrededor, el la vio y ella levanto la mirada y solo hizo un gesto de desplante y orgullo el se sonrió y pensó tal vez ... ya caerá... Elena fue a la tienda y regreso de nueva cuenta a su casa, el chico la esperaba ansioso afuera de su casa y cuando Elena paso frente a el, el la vio y con una cara dócil y estremecedora le dijo como cada día"vecina hoy se ve hermosa y radiante" con la diferencia de otros días hoy Elena solo se sonrió y siguió caminando hasta su puerta, el chico se admiro de esa sonrisa y le dijo - cuando sonríe el mundo se hace pequeño- Elena se sintió especial en ese momento, el chico no era del gusto de Elena tampoco pretendía nada con el simplemente que esas palabras que tanto había despreciado hoy por fin le arrancaron una sonrisa del rostro y eso ella lo agradecía.

Elena estaba enamorada y eso nadie lo sabia dentro de su corazón había alguien que llenaba su vida y aunque era un amor secreto en el rostro se le veía, por eso el semblante de Elena había cambiado, el amor cambia todo.